El 10 de mayo, investigadores de Australia descubrieron a través del análisis de datos que casi la mitad (48%) de los lobistas de la industria tabacalera habían ocupado previamente o después cargos en el gobierno federal o en posiciones estatales y regionales. Este informe fue publicado por The Guardian.
Melissa Jones, una investigadora del Consejo del Cáncer de Nueva Gales del Sur, quien participó en el estudio, afirmó que ella y sus colegas pasaron varios meses investigando la relación entre las compañías tabacaleras y diversos niveles de gobierno en Australia.
Es como armar un rompecabezas complejo de 5,000 piezas, muchas de las cuales están faltantes o en blanco.
Un estudio liderado por la Dra. Christina Watts, una experta en control del tabaco en la Universidad de Sídney, tiene como objetivo descubrir el fenómeno de la puerta giratoria en la industria del tabaco en Australia.
El fenómeno de la "puerta giratoria" se refiere a funcionarios gubernamentales o altos funcionarios públicos que pasan rápidamente de sus roles administrativos a trabajar en empresas privadas o grupos de interés relacionados con su trabajo anterior, o viceversa. Este fenómeno sugiere una relación cercana e intercambio de intereses entre el gobierno y el sector privado.
Las compañías tabacaleras están utilizando a estos "antiguos funcionarios del gobierno" para obtener conocimiento interno sobre el gobierno y la industria, con el fin de influir en las políticas de salud.
Este estudio hace un llamado a incrementar la transparencia y supervisión en la legislación con el fin de eliminar la influencia de la industria tabacalera en la política.
Este es un sistema inclinado a favor de entidades privadas impulsadas por el lucro en una industria poco saludable. Están tratando de desmantelar regulaciones más fuertes y socavar políticas de salud pública basadas en evidencia.
Jones afirmó que Canadá tiene un período de enfriamiento de cinco años, mientras que el período de enfriamiento de Australia es de solo 12 a 24 meses. En Estados Unidos, si los grupos de presión violan las leyes de lobby, podrían ser encarcelados. Irlanda tiene leyes estrictas de lobbying que requieren la divulgación de cualquier reunión entre los grupos de presión y los funcionarios del gobierno, así como también cartas, correos electrónicos o tweets con el objetivo de influir en política.
Su sistema es monitoreado y aplicado por organismos reguladores independientes, con el poder de imponer estrictas sanciones por cualquier violación.
Sin embargo, la ley federal australiana no requiere la divulgación de reuniones o comunicaciones entre ellos, y las leyes de cada estado y territorio no son uniformes.
El gobierno australiano planea regular este tipo de comportamiento.
La "Estrategia Nacional del Tabaco 2023-2030" incluye como prioridad establecer el requisito de que la industria tabacalera y otros actores relacionados informen regularmente sobre información, incluyendo gastos de marketing y actividades relacionadas como la promoción, trabajos de caridad y donaciones políticas.
Referencia:
Un estudio reciente ha revelado que casi la mitad de los cabilderos de tabaco en Australia han trabajado previamente en cargos gubernamentales.
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