Un estudio publicado en la revista Nicotine & Tobacco Research informa que las mujeres embarazadas en el sudeste asiático tienen más probabilidades de utilizar productos de tabaco sin humo, como el tabaco de mascar, que las mujeres no embarazadas.
El estudio analizó datos de encuestas de 1.3 millones de mujeres de entre 15 y 49 años de edad, provenientes de 42 países de ingresos bajos y medios. De estas participantes, 80,454 eran mujeres embarazadas, cuyos comportamientos de consumo de tabaco fueron comparados con los de las participantes no embarazadas.
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Shukla afirmó que este es un problema de particular importancia y es necesario desarrollar intervenciones personalizadas para ayudar a las mujeres a reducir o dejar de consumir tabaco, especialmente durante el embarazo debido a sus efectos adversos en el embarazo. Esto no solo incluye fumar, sino también el uso de tabaco sin humo, que generalmente se mastica, se inhala o se usa localmente en la boca.
Las mujeres embarazadas fumadoras deberían recibir "servicios para dejar de fumar que sean de fácil acceso y con opción de abandonarlos".
El Royal College of Physicians (RCP) en el Reino Unido ha sugerido que se ofrezcan incentivos económicos a las mujeres embarazadas que no pueden dejar de fumar, con el fin de ayudarlas a alcanzar su objetivo. El RCP también ha recomendado que los fumadores reciban servicios de cesación del tabaquismo "preparados para dejar de fumar" en cualquier punto de contacto con el Servicio Nacional de Salud (NHS). Además, la organización ha afirmado que dado que la mayoría de los fumadores suelen pertenecer a "grupos socioeconómicos bajos", proporcionar incentivos económicos a las mujeres embarazadas podría ayudar a motivarlas a dejar de fumar.
Estas sugerencias fueron presentadas como parte de un informe publicado por el RCP, con respecto a lo que se puede hacer para alcanzar el objetivo del gobierno de "Libre de humo en 2030". Sin embargo, datos recientes indican que a la tasa actual, este objetivo puede no alcanzarse hasta 2050.
La capacidad del Reino Unido y otros países para responder a desafíos importantes de salud pública es indiscutible. La pandemia de Covid-19 ha presentado el mayor desafío de salud en décadas para el Reino Unido y el mundo, generando respuestas tanto en salud pública como en el ámbito económico. Según un informe, su magnitud es sin precedentes en tiempos modernos. Sin embargo, en 2020, mientras que el Covid-19 causó la muerte de aproximadamente 80,000 ciudadanos británicos, el tabaquismo causó la muerte de 94,000 personas.
Fuente: VapingPost
Las mujeres embarazadas en el sudeste asiático tienden a usar tabaco sin humo, según un informe de Vaping Post.
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