Un estudio no encuentra relación estadística entre el consumo de cigarrillos electrónicos y el tabaquismo entre los jóvenes

Muchos defensores en contra de los cigarrillos electrónicos creen que estos pueden servir como una puerta de entrada al consumo de tabaco. Un estudio titulado "Intenciones de fumar y progresión del uso de los cigarrillos electrónicos al consumo de tabaco" afirma que el uso de cigarrillos electrónicos entre adolescentes que no tenían intenciones previas de fumar se asocia con un mayor riesgo de consumo de tabaco en el futuro.

Actualmente, se está llevando a cabo una investigación para medir el efecto de puerta de entrada examinando la relación entre el uso de cigarrillos electrónicos y las tasas de consumo de tabaco en general entre los jóvenes, incluyendo a los no fumadores. Si realmente existe un efecto de puerta de entrada, entonces el cambio en las tasas de consumo de tabaco entre aquellos que están asociados con el tabaquismo debería aumentar al mismo tiempo que el uso de cigarrillos electrónicos. Sin embargo, los autores del estudio no encontraron ninguna correlación estadísticamente significativa entre el uso de cigarrillos electrónicos y el consumo regular de tabaco entre los participantes de 16 a 24 años.

Estos hallazgos de investigación indican que podemos descartar el efecto de puerta de entrada grande previamente reportado, especialmente en el grupo de edad de 18 a 24 años. Sin embargo, no podemos descartar efectos de puerta de entrada más pequeños y no hemos estudiado grupos de edad más jóvenes. Si las estimaciones son correctas, estimamos que alrededor de 7.000 de los 74.000 usuarios de cigarrillos electrónicos de 16 a 17 años en Inglaterra se convertirán en fumadores regulares debido al uso de cigarrillos electrónicos. Al mismo tiempo, se estima que 50.000 fumadores dejan de fumar cada año debido al uso de cigarrillos electrónicos", dijo la investigadora principal, Dra. Emma Beard.

En países y regiones donde se reconocen los cigarrillos electrónicos, no hay evidencia de que estén creando un efecto de puerta de entrada.

Según los hallazgos de estas investigaciones, países como Reino Unido y Nueva Zelanda, que apoyan el uso de cigarrillos electrónicos como medio para dejar de fumar, no solo informan tasas bajas de tabaquismo, sino que tampoco tienen una proporción mayor de adolescentes que utilizan cigarrillos electrónicos. Los informes de estos países son consistentes con estudios previos sobre estos patrones, y un artículo reciente titulado "¿Justifica la teoría de la puerta de entrada la prohibición de los cigarrillos electrónicos de nicotina en Australia?" ha vuelto a refutar la teoría de la puerta de entrada.

Los autores de comentarios Colin Mendelsohn y Wayne Hall señalan que una explicación más razonable de por qué los jóvenes que vapean tienen más probabilidades de fumar se atribuye a factores de personalidad. Esto significa que los adolescentes que vapean tienen más probabilidades de ser personas que toman riesgos y, por lo tanto, más propensos a fumar, beber alcohol, consumir cannabis y otras sustancias, así como tener relaciones sexuales sin protección. Este argumento ha sido enfatizado por otros expertos en varios estudios.

Los principales hallazgos revisados por Mendelsohn y Hall son los siguientes:

Fumar generalmente precede al uso de cigarrillos electrónicos. Al menos el 70-85% de los adolescentes fumadores intentan usar cigarrillos electrónicos después de comenzar a fumar. La mayoría de los adolescentes usuarios de cigarrillos electrónicos son experimentales y el uso regular de cigarrillos electrónicos entre no fumadores es raro. En Australia y en encuestas internacionales, la proporción de no fumadores que usan regularmente cigarrillos electrónicos suele ser del 1% o menos. Muchos adolescentes usuarios de cigarrillos electrónicos solo usan aromatizantes y no consumen nicotina. La adicción a la nicotina es rara entre los usuarios de cigarrillos electrónicos que no fuman. En Estados Unidos, menos del 4% de los jóvenes no fumadores que usan cigarrillos electrónicos presentan síntomas de dependencia a la nicotina. Algunos adolescentes utilizan cigarrillos electrónicos para dejar de fumar. Desde la introducción de los cigarrillos electrónicos, las tasas de tabaquismo en adolescentes han disminuido rápidamente en el Reino Unido y en Estados Unidos, lo que hace poco probable que los cigarrillos electrónicos aumenten el consumo de tabaco en los adolescentes. Los cigarrillos electrónicos son más propensos a alejar a algunos adolescentes de alto riesgo del tabaquismo y dirigirlos hacia alternativas más seguras.

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