
El Instituto de Normas Comerciales Registradas (CTSI, por sus siglas en inglés) está instando al Reino Unido a implementar regulaciones más estrictas para la venta de cigarrillos electrónicos y productos relacionados al tabaquismo. La organización cree que, dado que a los jóvenes se les prohíbe comprar estos productos, los minoristas deberían retirarlos de los estantes o áreas de exhibición que sean fácilmente accesibles para ellos.
Actualmente, es ilegal que los minoristas vendan cigarrillos electrónicos a personas menores de 18 años. Sin embargo, no existen restricciones sobre la ubicación o exhibición de cigarrillos electrónicos y sus productos dentro de los establecimientos minoristas, según CTSI.
Aunque se recomienda que los minoristas coloquen los cigarrillos electrónicos fuera del alcance de los niños, actualmente no hay ningún requisito legal para que lo hagan.
La CTSI ha reconocido que el uso de cigarrillos electrónicos conlleva significativamente menos riesgo en comparación con fumar cigarrillos tradicionales: "Fumar sigue siendo la principal causa evitable de enfermedad y muerte en el Reino Unido". Además, la CTSI cree que usar cigarrillos electrónicos "puede ser una herramienta efectiva para ayudar a los fumadores a dejar de fumar".
Sin embargo, es necesario fortalecer la regulación para asegurar que los cigarrillos electrónicos no caigan en manos de niños y creen dependencia a la nicotina entre las generaciones más jóvenes.
El CTSI ha expresado su apoyo a medidas destinadas a reducir el atractivo de los cigarrillos electrónicos para los menores, por lo que respalda la propuesta de la Asociación de Gobiernos Locales de colocar todos los productos de cigarrillos electrónicos detrás de los mostradores de ventas.
El Instituto de Normas de Comercio Acreditado (CTSI, por sus siglas en inglés) ha expresado su preocupación por la disponibilidad de cigarrillos electrónicos ilegales y la venta de estos productos a menores en varias áreas del Reino Unido. El 60% de los miembros de CTSI informa que los vendedores ambulantes que venden cigarrillos electrónicos o productos relacionados a niños es el problema de aplicación más alarmante que se enfrenta actualmente. Datos recientes de normas comerciales también muestran un aumento en la venta de productos de cigarrillos electrónicos a menores.
Teniendo en cuenta que el problema radica en los minoristas irresponsables que venden productos a clientes menores de edad, actualmente no está claro cómo cambiar la ubicación de los productos dentro de la tienda mejorará la situación.
Veronica McGinley, una funcionaria responsable de restringir la venta a menores de edad en CTSI, afirmó que el actual sistema de exhibición sin restricciones y de sabores ha llevado a la creación de exhibiciones de productos brillantes, coloridas y atractivas que claramente están dirigidas al mercado juvenil y se comercializan como productos de estilo de vida en lugar de auxiliares para dejar de fumar.
Además del aumento de los cigarrillos electrónicos desechables baratos y fáciles de usar en el mercado, hemos creado una tormenta perfecta que ha llevado a los departamentos de comercio estándar de todo el país a recibir quejas de padres acerca de niños menores de 13 años usando cigarrillos electrónicos.
Aunque los cigarrillos electrónicos pueden ser una herramienta efectiva para dejar de fumar, nunca se han comercializado como un producto de estilo de vida y han atraído a una nueva generación de jóvenes que nunca han fumado antes. Si bien estos productos son más seguros que los productos de tabaco tradicionales, aún representan riesgos. Pueden llevar a la dependencia de la nicotina y los efectos a largo plazo aún no están claros.
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