Recientemente, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ha vuelto a denegar una solicitud de la tabacalera R.J. Reynolds para lanzar al mercado dos productos de cigarrillos electrónicos. Según las organizaciones de salud estadounidenses, "las pruebas existentes sugieren que los cigarrillos electrónicos con sabores no relacionados al tabaco representan un riesgo sustancial conocido para los jóvenes; por otro lado, los datos demuestran que los cigarrillos electrónicos con sabor a tabaco no tienen el mismo atractivo para los jóvenes y, por lo tanto, no representan un nivel de riesgo equivalente".
Unos días después, la FDA autorizó a PMI la venta de tres tipos de palitos de tabaco para IQOS, conocidos como Marlboro Sienna, Marlboro Bronze y Marlboro Amber. No contienen sabores adicionales aparte del tabaco. Muchos observadores son muy escépticos de que la FDA autorice algún producto con sabor.
En 2020, aproximadamente 34 millones de estadounidenses continuaron fumando. Se ha comprobado que el aroma de los sabores presentes en los líquidos de los cigarrillos electrónicos es fundamental para ayudar a los fumadores a dejar de fumar.
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